Diseño minimalista vs. diseño kitsch
INTERIORISMO
Una de las tendencias que más triunfan en nuestra época es el minimalismo, un estilo que se define por sus líneas simples y la combinación de colores neutros y por decorar con el mínimo de elementos posible.
Busca ante todola pureza de las cosas mientras que su estilo opuesto, el estilo kitsch, es completamente diferente. Desde el punto de vista del diseño decorativo es algo así como un “freestyle”, da rienda suelta a la libertad.
En los locales comerciales donde predomina este estilo veremos un clara supremacía de figuras, texturas, colores, un montón de cosas agrupadas: en general la filosofía de la exageración. Se rescatan elementos barrocos y se incorporan de manera desordenada a un estilo que aúne muchos y variopintos rasgos de las distintas tendencias del siglo XX.
Pero, ¿Cuáles son las características principales que definen a un estilo como minimalista?

Pureza
Este estilo es muy proclive a utilizar colores puros, superficies con colores o fondos monocromáticos, tonos entre blanco y beige, en su mayoría muy suaves. Y los toques de color solamente se usan para acentuar accesorios y detalles.
Los que más se suelen usar son los verdes o azules para espacios decorados en su mayoría con colores grises, beige y blancos.
Simplicidad
Si hay algo que define a este estilo es la simplicidad, para ellos “todo es parte del todo”. ¿Esto qué significa? Que deberemos evitar en la medida de lo posible cualquier repetición visual o elementos que destaquen por encima del conjunto.
Uso de los materiales
Veremos que la madera es un recurso bastante utilizado en estos diseños. Los muebles, las lámparas y los marcos de fotos están hechos de diferentes tipos de maderas y materiales naturales como los cestos de mimbre, etc.
Otros de los materiales preferidos por excelencia son los cerámicos, usados para decorar tanto suelos como paredes acompañado de elementos decorativos como los materiales rústicos, jarrones en piedra y espacios abiertos, vidrio o elementos decorativos hechos de alambre.
Texturas serenas
Se busca aportar serenidad y frescura antes que vitalidad o colorismo. Por ello las telas usadas son de color neutros: marrones claros, blancos, tonos pastel y los materiales el lino o las lonetas.
Desmaterialización
Se evitan los excesos en cualquier lado, nada de accesorios, paredes diáfanas, vestidas únicamente con piedras, cerámica o madera.
El kitsch, la otra cara de la moneda
“Cuanto más de todo mejor”, esta es la máxima de este estilo, a través de la acumulación de objetos, de la pérdida del orden y la búsqueda de la nula planificación (o al menos la apariencia de ella).
Se busca que cualquier esquina donde miremos sea lo más interesante posible, que cada parte de la decoración tenga algo que contar, algo totalmente contrapuesto con el minimalismo que busca un conjunto.
¿Cuáles serían las características kitsch?

Mezcla
Se busca la combinación de colores, formas, estampados, generalmente más de dos estampados a la vez, florales, moteados, animal print…
Búsqueda de lo llamativo
En este estilo veremos que predominan los colores primarios en sus tonos más brillantes; se usan el rosa chicle, el azul turquesa, el verde manzana, colores mucho más vivaces y estridentes.
Exceso
Al contrario que con la desmaterialización con el minimalismo, aquí se colocan todo tipo de materiales y accesorios que no tienen ningún tipo de utilidad, solamente para rellenar espacios vacíos.
Se consideran como accesorios todo tipo de cosas, elementos antiguos que encontremos en el trastero, piezas de coleccionista, juguetes (muy utilizados en estos estilos) que hacen que saquemos a nuestro niño interior.
Los parches o patchwork son bien recibidos en sillas, sofás, cortinas o manteles. E incluso se incorporan elementos religiosos para darle más extravagancia a las estancias.